Grandes Ausencias y Tesoros Encontrados

Buenos días:
Tiempo hace que no posteaba con asiduidad ya que numerosos compromisos me mantenían alejado de las redes y de mi miserable vida social que a ustedes por supuesto no les interesa un carajo, y no lo digo porque yo no desee compartir mis íntimas vivencias, sino porque carecen de cualquier interés para la media de los mortales que acceden a esta modesta bitácora.
Esta serie de compromisos se podrían resumir en una grata experiencia tanto a nivel profesional como personal. Mi gran amigo y ex-compañero de Facultad don Máximo Ferrer, con domicilio en Valladolid, calle Victoria, número 37 entresuelo C, me invitó a participar en una excavación arqueológica próxima a la localidad de Almería, siguiendo las investigaciones del doctor Carlos Cardón Venanz de un yacimiento en la zona cuya datación pertenecía al Bajo Medievo, o algo así.
El caso es que tras tres tris...no, en serio....tras tres meses de quitar polvo a cualquier pedrusco que encontráramos y pasar un calor horroroso que amenazaba de muerte y destrucción, la experiencia fue un éxito ya que se hallaron unos pergaminos ilustrados que protegían unas tablas de mármol con inscripciones en latín que en breves entregas pasaré a comentar, ya que gracias a mi colega don Santiago Galindo Corrán, doctor en letras clásicas y licenciado en Filología Hispánica e Historia Antigua conseguimos traducir dichos textos y también con la inestimable ayuda y apoyo incondicional del departamento de Geografía e Historia de la Universidad Complutense de la Villa de Madrid hemos logrado dar con el significado de los mismos.
Como bien he indicado, en breve pasaré a compartir con todos ustedes, este gran hallazgo que sin duda aportará luz a una de las etapas más oscuras de la Historia de España.
A pesar de la gravedad de mi discurso y de la rectitud en las formas que me precede, no crean que no soy capaz de hacer concesiones a los sentimientos humanos. He de admitir que en ocasiones les he echado de menos y he hecho todo esfuerzo posible por ahogar mis lágrimas ya que no procede que un caballero de mi edad y condición protagonice tan trágica estampa.
Seguiremos informando compañeros, bienvenidos sean de nuevo.
Lord Grayworth.