sábado, enero 13, 2007

Bruno!

Bruno, ey Brunoo!!! Pero sonríe un poco, hombre...!


Tiempo ha que no frecuentaba lo agradabilísimo de esta bitácora y rincón de sosegadas lecturas e historias fantabulosas y nosequé.

Como siempre mis múltiples ocupaciones me tienen distraido y no es para menos.

Aquí les quería yo presentar a mi buen vecino y compañero Bruno. Sí, Bruno a secas, ya que prefiere no tener apellido y así ha sido siempre.

Bruno está contentísimo porque acaba de adquirir una tumba de cristal... Es bastante interesante porque así dice que cuando esté muerto podrá ver a través de ella, ya que una de madera opaca es bastante aburrido teniendo en cuenta la de horas muertas (Ja ja ja ja ja ja aja ja jaa jaj aj aj aj ja ja ) que se pasa uno ahí dentro. Que se lleve un libro también, le digo a veces. Pero nada, se empeñó en su capricho y no hay más que hablar.

No.